jueves, 27 de febrero de 2014

Quien iba a pensar que encontrar las invitaciones perfectas sería tan difícil... y tan simple

Ya teníamos el primer paso, los regalos o al menos una parte de ellos, porque todavía faltaba saber que más añadíamos a ellos, pero eso es algo de lo que hablaré más adelante. En siguiente paso y siguiente problema con el que nos encontramos, fueron las invitaciones.

Habíamos pensado un poco en ellas, pero no teníamos una idea definida de lo que estábamos buscando, tan solo sus características; algo simple pero especial, original y bonito, pero bajo ningun concepto hortera y sobretodo algo que nos gustara a las dos.

Todavía (a veces) nos sentimos excluidas por ser dos mujeres

Lo que no habíamos pensado en ese momento era que la mayoría, no casi todos los ejemplos de invitaciones con los que nos encontramos en cada sitio al que íbamos, estaban preparados para un hombre y una mujer, con un muñequito de cada sexo y los pocos que estaban preparados para parejas del mismo sexo, ¿cómo decirlo? eran horrible, ridículas, muñecos totalmente blancos, como los del día de los inocentes, monigotes sin personalidad y que después de varias tiendas, casi nos daban ganas de desesperarnos.

Eso si, hubo algo que nos hizo sentir peor todavía y que nos puso, aunque solo fuera por un momento los pies en el suelo. Entramos en una tienda, preguntamos si hacían invitaciones de boda, nos dijeron que así era y todo parecía ser perfecto hasta que les comenté que eran para mi novia y para mi, dos chicas.

En cuestión de un minuto, la situación cambió y de la frase original que me dijo la dependienta, "Ahí tenéis los catálogos con los ejemplos para que les vayáis echando un vistazo y ahora mismo estoy con vosotras.", pasamos a un silencio absoluto, a que nadie nos hiciera caso y tras mirar los catálogos que tenían los mismos ejemplos que no nos gustaban desde un principio y que ya habíamos visto en otras tiendas, nos fuimos, ofendidas, casi humilladas y con la sensación de que las cosas todavía tenían que cambiar mucho.

Llegadas a ese punto, nos preguntamos donde íbamos a encontrar el lugar que nos hiciera las invitaciones de boda como nosotras queríamos. Pero como ya empezaba a ser una costumbre en nuestro camino hacia el altar y cómo se repetiría en otras ocasiones futuras, el destino quiso que el lugar adecuado nos encontrara a nosotras.

Encontrando lo que buscamos

Fue un día, iba de camino al trabajo y descubrí que una tienda que no había visto hasta entonces, debían llevar abierta poco tiempo, porque en el pueblo conozco casi todos los comercios del centro y ese me llamó la atención.

Se llamaba Bolboretas y dragones y se dedicaba al scrapbooking. No voy a decir que supiera entonces lo que era eso del scrapbooking exactamente, ni remotamente, pero para aquellos de vosotros que tampoco lo sepáis y os pique la curiosidad, os pondré luego unas cuantas fotos, sobre lo que se puede hacer con esta técnica, fácil y personal.

Volviendo al tema de la boda, lo que realmente llamó mi atención, fue que entre las cosas que hacían, una de ellas era invitaciones de boda.

Entré y me atención Mayca, la dueña de la tienda, le hice la pregunta de rigor sobre las invitaciones y quedé en volver a la tienda con mi novia para hablar del tema y si nos podía enseñar algo del trabajo hacían. Cuando volvimos a los pocos días, también estaba Ariadna.

Me confirmaron lo que ya sabía, acababan de abrir un mes antes y precisamente por eso, no tenían todavía ningún ejemplo de las invitaciones de boda que hacían. Sin embargo, nos comentaron que podían hacernos las invitaciones a medida. Ariadna había estudiado bellas artes y era y lo es, una dibujante estupenda; nos enseñó algunos de sus diseños, todos preciosos y nos dijo que podía hacer uno para nosotras.

También hablamos, aunque será más apropiado que fue Martina la que lo hizo, sobre la letra, el papel, la decoración de las invitaciones, el color, el estilo y el texto, que todavía no teníamos preparado. Pasaron casi dos horas, pero finalmente tuvimos una ligera idea de lo que queríamos.

En nuestra siguiente visita, no encontramos con el diseño listo
, no estaba pintado pero era perfecto, nosotras dos, dos monísimas caricaturas que nos enamoraron desde el principio y bajo nosotras, nuestro perro. Después de ese momento, no hubo dudas, era justo lo que estábamos buscando.

Tras ese primer momento, elegimos el papel y el diseño exacto de como sería toda la invitación. Además, les pedimos que nos hicieran unas pocas invitaciones más, que no incluirián el texto sobre el lugar, la hora y demás, para la gente que no pudiera venir.

Mayca y Ariadna, llevan trabajando casi cuatro meses en nuestras invitaciones, nos han propuesto ideas, han seguido todos nuestros cambios y desde el principio, supieron entender lo que queríamos. A última hora, les pedimos que hicieran unos pequeños marcalibros para esas mismas personas que no podrían venir a la boda, como todo los diseños y posibilidades anteriores, acertaron de lleno.

Igual que las muñequitas venidas desde Italia, todavía no tenemos las invitaciones, espero poder tenerlas en una semana.

Como os he dicho antes, os dejó aquí algunas fotos del trabajo que podréis ver y aprender vosotros mismos en Bolboretas y dragones, gracias a sus muchos talleres de scrapbooking.


 Aquí os dejo también, en enlace la página de Bolboretas y dragones para que le echéis unos vistazo por si estáis buscando un lugar que os haga las invitaciones de boda o cualquier detalle hecho con papel a vuestra medida.


domingo, 16 de febrero de 2014

Las ideas perfectas aparecen por casualidad

Una vez que Martina y yo decidimos casarnos, comenzó el largo recorrido para conseguir encontrar todo lo que nos gustaría que formara parte del puzzle de nuestra boda. Desde el principio sabíamos que queríamos algo simple, íntimo, pero sobretodo algo que nos emocionara nada más verlo, y que supiéramos que era nuestro. El problema era saber por donde empezar a buscarlo.

Lo que entonces no sabíamos es que las cosas justas, las cosas perfectas para el día más bonito de nuestra vida, aparecerían delante de nosotras sin tan siquiera esperarlo.

La primera vez que nos pasó fue con (casi) lo único en lo que no había pensado cuando imaginaba mi boda; los regalos para los invitados.

Un día como otro cualquiera, Martina entró en su facebook, leyó los comentarios de algunos amigos, los comentó y de pronto, aparecido de la nada una publicación compartida por alguien, una maravillosa muñequita Disney, de unos pocos centímetros de altura, proveniente de una página llamada Lovi Lovi Shop.

Tan solo nos hizo falta echar un rápido vistazo para saber que esto era precisamente lo que queríamos regalar a nuestros invitados, algo original, único y lleno de fantasía.

Elsa - Frozen
La artista que está detrás de estos preciosos diseños se llama Federica, es Italiana y en menos dos años ha pasado de hacer muñecas de ojos blancos y enormes a lo que podéis ver en su página de facebook y en las fotos que os dejo aquí.

Desde el primer momento en que le propusimos que nos hiciera los regalos para los invitados, Federica se mostró muy ilusionada, incluso nos dijo que era la primera vez que hacía algo así. En primer lugar le dijimos que éramos dos chicas y ella se mostró encantada de hacer esto para nuestra boda. Le hablamos sobre hacer unos cincuenta, (suma que posteriormente subió hasta cincuenta y cinco) y nos hizo un precio espectacular.

Para nuestra sorpresa, también nos ofreció, por el mismo precio, hacernos las dos figuritas para la parte superior de la tarta, mucho mayores que las otras, de unos trece centímetros, frente a los dos y medio del resto (aunque a ultima hora se han quedado en unos siete centímetros, por el miedo a que pudiera hundir la tarta)
Alicia - Alicia en el país de las maravillas

¿El tema de las dos muñequitas de la tarta?

Pocahontas - Pocahontas
Lo tuvimos claro desde el principio, sabíamos lo que queriamos, pero claro, no encuentras en todas las tiendas figuras de boda para dos chicas y las pocas que encuentras no eran precisamente lo que buscábamos y apenas encuentras un gran catálogo de posibilidades, no cuando eres una pareja de dos chicas.

Pero cuando apareció Federica, las palabras salieron de nuestras bocas casi al mismo tiempo: Elphaba y Glinda. (Ambas, los personajes principales del libro y musical Wicked.)

Mirage - Los increibles
En cuanto tuvimos la lista de todos los personajes que queríamos, todos Disney y Marvel, después de poner unos, quitar otros, poner unos nuevos y tener demasiados como para elegir tan solo cincuenta y cinco, era el momento de que los invitados fueran eligiendo su regalo de la lista que creamos; algunos tuvieron serios problemas para elegir tan solo uno, otros en cambio sabían exactamente quien querían y después solo nos quedaba esperar e ir viendo las fotos que Federica a ido subiendo a su facebook.

Rapunzel - Enredados
A día de hoy todavía no tenemos nuestras muñequitas con nostras con nosotras, pero Federica ya nos ha dicho que está terminando los últimos detalles y que tan solo le quedan tres o cuatro para tenerlas todas finalmente hechas, así, por el momento seguimos mordiéndonos las uñas para tener su trabajo.

Federica y su trabajo

La estatua de la libertad
Federica no sólo hace diseños de Disney. Por eso, os dejo aquí una foto, de otro de los diseños que hemos adquirido esta última semana. En esta caso, esta pequeña estatua de la libertad, pertenece a una colección que hizo sobre distintos países del mundo.

Los diseños de Federica son perfectos, para hacer colgantes, pulseras, decoraciones de móviles o también podéis ver pequeños escenarios igualmente preciosos.

Si queréis hacerle algún encargo solo tenéis que entrar en su página de Facebook y poneros en contacto con ella, estoy segura que encontraréis lo que estáis buscando, bien sea para vosotros o bien para un bonito regalo.

Lovi Lovi shop


sábado, 15 de febrero de 2014

15 de Agosto... 6 meses de cuenta atrás para el día de mi boda

Me llamo Victoria, tengo casi 29 años y hace dos empecé a salir con la que ahora es mi novia y prometida, Martina. 
Casi desde el primer día, la palabra boda y matrimonio formaba parte de nuestras conversaciones, nuestro futuro juntas, donde vivir, que era lo que ambas esperábamos e una vida juntas, incluso si queríamos hijos; sobretodo porque por algún motivo que desde luego no se cual es, podría llamarlo destino o providencia, sabíamos que habíamos encontrado a la persona con la que pasar el resto de nuestras vidas.
¿Habéis oído hablar alguna de vez de la leyenda griega que cuenta la separación de un mismo alma en dos mitades? Según dicha leyenda, los dioses del Olimpo, temerosos de lo fuertes que eran los humanos y envidiosos de su felicidad, decidieron separarlos en dos mitades y así, mientras pasaban la vida buscando a su mitad perdida, no intentarían robarles el poder. 
Hay gente que encuentra la mitad que le falta, otros no dan con ella nunca; en mi caso, un 29 de Enero, en Madrid y por una serie de increíbles coincidencias, Martina y yo nos conocimos gracias a unas amigas y nada más vernos, nos enamoramos. Tardamos cinco meses, viéndonos durante los fines de semana, sumando kilómetros de viajes de autobús entre Zaragoza y Barcelona, en vivir juntas; momento en que yo me mudé a Barcelona y un tiempo más tarde, le pedí que se casara conmigo.
Ahora a seis meses del gran momento, del gran día, tenemos que tenerlo todo preparado y no son pocas cosas (El lugar, las invitaciones, los vestidos, el menú, las flores, las fotos...) sobretodo cuando no quieres lo de siempre, buscas una boda que sea solo tuya y más que nada, cuando todo lo que te vas encontrando, desde los modelos de invitaciones, hasta las alianzas, pasando por los descomunales precios de los vestidos, están destinados a un matrimonio formado por un hombre y una mujer.
¿Tan difícil era encontrar lo que nosotras queríamos?
Desde el pasado mes de agosto, eso es lo que hemos estado haciendo, buscar todo lo que convirtiera el día de nuestro boda en el día más maravilloso de nuestra vida y pensando en otras parejas que como nosotras quieren algo más que lo que podemos encontrar en la mayoría de las tiendas, me gustaría ir hablándoos sobre el camino que hemos recorrido y el que todavía nos queda por delante para llegar a ese 15 de Agosto, en el que nuestras vidas cambiarán para siempre.